domingo, 1 de abril de 2012

Perfecta imperfección

Siempre creí en el amor a primera vista. Recuerdo tus miradas, esas miradas profundas que me ponían nerviosa y a la vez me enamoraban. Tus sonrisas; mi adicción, ¿sabías lo perfectas que me resultan? Tus palabras mi veneno, las únicas que consiguen animarme en el peor de los días, a tu lado los problemas desaparecen, como si nunca hubieran existido. Pensé que eras perfecto, y te esperé sentada viendo como pasaba el tiempo y no sabías que estaba allí, eso me ayudó a comprender que la perfección no existe, tampoco las almas gemelas, ni los cuentos de hadas, simplemente son ilusiones con las que crecemos y con el paso del tiempo vemos que no se cumplen, que nunca llegará el príncipe que siempre quisimos, o el beso romántico a la luz de la luna, nada es eterno y aunque te siga queriendo he retomado mi camino y no volveré a echar la vista hacia atrás.